Ganó todas las finales que jugó (siete en total) de la Copa Libertadores de América, sin recurrir a la definición por penales. El cupo a la Copa UEFA tuvo que decidirse en un único partido disputado en Torino, que el equipo rossonero se adjudicó por la mínima diferencia en el tiempo suplementario. El partido de ida jugado en Santiago de Chile terminó en derrota para el Rojo por 1-0, y en la vuelta triunfó por 3-1 con goles del peruano Percy Rojas, Pavoni de penal y otro de Daniel Bertoni.